Éste casi extinto 2016, en cuanto a lo musical se refiere, se caracterizará por aquellos artistas icónicos y que han marcado una época y un estilo y que han traspasado.
Aparte de los artistas de primera línea, como Juán Gabriel, Manolo Tena, Bowie, Prince, Cohen o George Michael, también, nos dejaron otros menos ínclitos como la segunda voz de los Eagles Glen Frey, Leon Haywood, Sharon Jones de los Dap-Kings, el vocalista y guitarra rítmica de Status Quo, Rick Parfitt, y el ‘quinto beatle’ George Martin, responsable de entre otros, de los arreglos de cuerda de la canción ‘Yesterday’ que compuso McCartney.
Y como no, este 2016 también nos ha dado epifanías musicales como las que hemos querido destacar aquí, siendo sinceros, al menos, con nosotros mismos. Ya que hay listas por ahí que son el paradigma del esnobismo.
Evidentemente que cada cual tendrá su propia lista y sus gustos musicales, esto nuestro es más un divertimento que adoctrinamiento, es compartir música, nada más.
Así pues, en el TERRENO NACIONAL queremos destacar los TRES siguientes álbumes:
3.LEON BENAVENTE. 2. La segunda entrega del cuarteto, mantiene el nivel alcanzado en su debut y siguen siendo uno de los garantes del sonido post-punk hecho por estas lindes.
2.TRIÁNGULO DE AMOR BIZARRO. Salve Discordia. Los gallegos se mantienen fieles a esa mezcla de noise-rock y shoegaze, entre otros estilos con los que flirtean, todos ellos flamígeros e incisivos, que envuelven sus melodías y son como un croché que te noquea al primer rasgado de guitarra.
1.LOVE OF LESBIAN. Poeta Halley. Y no es que hayamos ido a lo previsible y lo más obvio, al contrario, ya que este nuevo trabajo del grupo parece que ha pasado por debajo del radar de la prensa especializada (a veces, todo hay que decirlo, demasiado esnob). Pero a nosotros nos parece apabullante la capacidad creativa de Santi Balmes, que después de dos décadas y ocho elepés, sigue creando himnos para ser coreados en sus conciertos. Hitazos sin ningún tipo de pretensión, de pop básico sin mayores arreglos pero altamente efectista. Y en esa sencillez radica su alquimia musical para alumbrar un trabajo repleto de singles.
En cuanto a los ÁLBUMESINTERNACIONALES, destacamos la siguiente terna:
3.Richard Ashcroft. These People. Cuando nadie le esperaba, llegó este auténtico superviviente del Britpop, el líder de The Verve, que en su carrera en solitario nos puso este año a nuestra disposición, una obra maestra repleta de pasajes líricos, bajo el sutil influjo del trovador británico. Merecido pódium de honor para este gentleman con una propuesta tan acertada.
2.KANYE WEST. The Life Of Pablo. No es el primer año que el señor West se encumbra en nuestra lista de lo mejor del año. Es un auténtico genio y hace lo que quiere y como quiere. Después de su anterior propuesta en forma de larga duración que se adentraba en un terreno más experimental e industrial, en esta octava entrega, aunque todavía mantiene ciertas trazas de esos sonidos, dirige la mirada a ese Hip Hop más lírico y cercano al góspel. Pero no deja de ser un trabajo repleto de sorpresas que rompe cualquier frontera estética, que unas veces se acerca al Hip Hop más clásico, otras, al House ochentero, e incluso, al r’n’b de los 70.
1.BON IVER. 22, A Million. A día de hoy para nosotros, Justin Vernon, con sus diferentes proyectos, en concreto el que le sitúa como nuestro número uno de este año bajo su alter-ego BON IVER, está un peldaño por encima del resto de artistas.
El álbum ‘22, A Million’ publicado este año, y siendo el tercero en su carrera, lo consagró como un orfebre musical, que acompañado de su vocoder es capaz de reescribir los patrones musicales conocidos hasta día de hoy. Y el poso que subyace detrás de esas capas de sonido hipnóticas y de un trabajo de laboratorio sonoro, son temas emotivos de raigambre folky, que se diluyen como resultado de ese experimento musical que factura el malabarista BON IVER.
3.LEON BENAVENTE. 2. La segunda entrega del cuarteto, mantiene el nivel alcanzado en su debut y siguen siendo uno de los garantes del sonido post-punk hecho por estas lindes.
2.TRIÁNGULO DE AMOR BIZARRO. Salve Discordia. Los gallegos se mantienen fieles a esa mezcla de noise-rock y shoegaze, entre otros estilos con los que flirtean, todos ellos flamígeros e incisivos, que envuelven sus melodías y son como un croché que te noquea al primer rasgado de guitarra.
1.LOVE OF LESBIAN. Poeta Halley. Y no es que hayamos ido a lo previsible y lo más obvio, al contrario, ya que este nuevo trabajo del grupo parece que ha pasado por debajo del radar de la prensa especializada (a veces, todo hay que decirlo, demasiado esnob). Pero a nosotros nos parece apabullante la capacidad creativa de Santi Balmes, que después de dos décadas y ocho elepés, sigue creando himnos para ser coreados en sus conciertos. Hitazos sin ningún tipo de pretensión, de pop básico sin mayores arreglos pero altamente efectista. Y en esa sencillez radica su alquimia musical para alumbrar un trabajo repleto de singles.
3.Richard Ashcroft. These People. Cuando nadie le esperaba, llegó este auténtico superviviente del Britpop, el líder de The Verve, que en su carrera en solitario nos puso este año a nuestra disposición, una obra maestra repleta de pasajes líricos, bajo el sutil influjo del trovador británico. Merecido pódium de honor para este gentleman con una propuesta tan acertada.
2.KANYE WEST. The Life Of Pablo. No es el primer año que el señor West se encumbra en nuestra lista de lo mejor del año. Es un auténtico genio y hace lo que quiere y como quiere. Después de su anterior propuesta en forma de larga duración que se adentraba en un terreno más experimental e industrial, en esta octava entrega, aunque todavía mantiene ciertas trazas de esos sonidos, dirige la mirada a ese Hip Hop más lírico y cercano al góspel. Pero no deja de ser un trabajo repleto de sorpresas que rompe cualquier frontera estética, que unas veces se acerca al Hip Hop más clásico, otras, al House ochentero, e incluso, al r’n’b de los 70.
1.BON IVER. 22, A Million. A día de hoy para nosotros, Justin Vernon, con sus diferentes proyectos, en concreto el que le sitúa como nuestro número uno de este año bajo su alter-ego BON IVER, está un peldaño por encima del resto de artistas.